Te vi...

Ayer apareciste, cuando sabía que no estarías ahí, tendrías que haber estado en la facultad, será que ya no tienes tanto apuro por recibirte, será que has entendido que vivir también es bueno. La verdad que cual quiera que sea la razón, no me gustó verte conectado, no me gustó saber de vos, porque ahora que te olvidaba, apareciste para hacerme recordar los buenos o no tan buenos momentos vividos, recordar aquellas palabras, en fin… No quería encontrarte.
No solo te vi, sino que también discutimos como es costumbre en nosotros. Supe desde el día en el que conocí que no éramos compatibles, pero igual me enamoré, y hoy que estoy conociendo a quien me valora, me quiere, y me respeta, sin embargo cuando puedo sueño y te recuerdo.
El día que pueda olvidar esos ojos, me voy a sentir excelente, el día que ya no sientas deseos de llorar al recordarte, creo que ese día voy a estar curada de tanto amor enfermo que acumulé el día que te conocí.
Por otro lado, pido perdón, pido perdón, porque no se si lastimo a alguien, no se si te estoy lastimando a vos, que me das todo, me tratas como una mujer, y me haces saber lo que valgo, a vos que cada vez que te cuento lo mucho que me usaron y hasta lloro en tu hombro te pones mal y se nota la rabia que sentís. Perdóname, porque sabiendo que somos iguales, amo a otra persona, ya no se si quizás seré masoquista…
Quiero borrarte, pero soy cobarde para hacerlo, aún tengo una esperanza, la del sueño del hombre despierto, de que me ames y estés conmigo, dedicándome el tiempo que me merezco.